Niccoló Paganini, conocido como el violinista del diablo, dejó una huella imborrable en la historia de la música. Sus habilidades técnicas y su virtuosismo al violín cautivaron al público y lo convirtieron en una leyenda. Pero pocos conocen la historia del instrumento que lo acompañó en sus hazañas: el violín Guarneri del Gesu.
El Violín de Paganini
El violín de Paganini fue construido por Giuseppe Guarnerius del Gesu en Cremona, Italia, en 174Este instrumento, apodado il mio cannone violino (mi violín cañón) por su potencia y sonido robusto, se convirtió en el amor de su vida. Paganini fue propietario de varios instrumentos, incluyendo algunos Stradivarius, pero fue el Guarneri del Gesu el que lo cautivó.
En noviembre de 1833, mientras se encontraba en París, Paganini decidió llevar su violín al constructor de violines francés Jean Baptiste Vuillaume para que lo reparara. Durante este periodo, Paganini enfermó y consideró dejar de tocar el violín y venderlo. Sin embargo, después de la reparación, Paganini siguió tocando recitales por toda Europa hasta su muerte en 1840.
Antes de fallecer, Paganini decidió hacer su testamento y dejó una cláusula en la que señaló: mi violín lo dejo a la ciudad de génova para que sea conservado por siempre. Sin embargo, su hijo Aquille, renuente a entregar el instrumento, trató de evadir el compromiso. Después de once años de insistencia, en 1851 el violín fue finalmente entregado a la ciudad y desde entonces se exhibe en el Museo Municipal de Génova.
El Violín en el Museo Municipal de Génova
El violín de Paganini, conocido como el Cannone, se encuentra en una sala especialmente preparada para su conservación en el Museo Municipal de Génova. Esta sala está equipada con controles climáticos y de humedad, así como con un sofisticado sistema de seguridad para proteger el instrumento.
Junto al violín Cannone se encuentra una colección de artefactos que pertenecieron a Paganini, como su estuche, el último juego de cuerdas que utilizó, su arco, varias pinturas y cartas. En una urna similar a la del Cannone se exhibe la copia del violín hecha por Vuillaume, que fue propiedad de Camilo Sivori, único alumno de Paganini.
Desde que se exhibe en el Museo Municipal, solo un selecto grupo de violinistas han tenido el privilegio de tocar el violín de Paganini. Entre ellos se encuentran Camilo Sivori, Ruggiero Ricci, Salvatore Accardo, Borislaw Hubermann y los ganadores del Concurso Paganini de Violín, como Gidón Kremer y Massimo Quarta.
El valor del violín de Paganini
El violín de Paganini es considerado una obra maestra de la luthería y su valor es incalculable. A lo largo de los años, algunos violines de Paganini y otros instrumentos de renombrados constructores han sido subastados por cifras millonarias. Por ejemplo, un violín Carlo Bergonzi, que también perteneció a Paganini, fue subastado por 88300 dólares en 200
Además, el violín de Paganini ha sido objeto de interés en el ámbito de la música. El ganador del Concurso Paganini de Violín tiene el privilegio de tocar este instrumento durante un año, lo que demuestra su gran valor artístico y musical.
El violín Guarneri del Gesu que perteneció a Paganini es un instrumento legendario que ha dejado una huella imborrable en la historia de la música. Su sonido potente y su historia maravilloso lo convierten en un tesoro invaluable. Aunque pocos tienen el privilegio de tocarlo, su legado perdura en la música y en la memoria de los amantes del violín en todo el entorno.
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